HISTORIA
En la historia de Enciso aparece reflejada la villa en la Alta Edad Media en el voto del conde Fernán González, junto a Cameros y Ortigosa. Su castillo, hoy en ruinas, pertenecía en el siglo XIII a la Orden de Calatrava, que -el 17 de noviembre de 1288- lo cedió de por vida a don Vela Ladrón de Guevara; éste en reciprocidad, entregó a la orden sus propiedades de Écija.
Perteneció a la jurisdicción de los duques de Medinaceli, quienes -hacia 1751- recibían por del vecindario una renta anual próxima a los seis mil reales en concepto de alcabalas.
El ‘Catastro’ del marqués de Ensenada refería, a mediados del siglo XVIII, que había en la villa tres batanes, cinco tintes, una tanería y una prensa de fuego.
Formó parte de la provincia de Soria hasta la creación de la provincia de Logroño por Real Decreto de 30 de noviembre de 1833.
Fueron, entre otros, hijos ilustres de Enciso Juan de Iturriaga, carmelita descalzo que llegó a general de la Orden en 1625 y 1637 y escribió, entre otras obras, la ‘Carta a los religiosos del Carmen’; fray Pedro Marín y fray Alejandro Marín, abades ambos de Santa María la Real de Nájera; y Niceto Alonso Perujo, director del ‘Diccionario Enciclopédico de Ciencias Eclesiásticas’ editado en 1883 en diez voluminosos tomos.
Enciso fue en el pasado antiguo centro ganadero y como consecuencia de esto, y al igual que el resto de la comarca, vio prosperar una importante industria textil
Hoy los grandes edificios de los telares, diseminados por el territorio, nos recuerdan este pasado. Una sola de estas fábricas (Hilados y Tejidos Marín) continúa con este tradicional trabajo produciendo entre otras, las famosas mantas de pastor.
Edificio de sillería construido en diferentes etapas a partir de finales del siglo XV. Nave de cuatro tramos más cabecera. Los dos primeros tramos, con triple nave. Bóvedas de crucería estrellada y de terceletes. Sacristía -obra de Juan Marín, Domingo del Campo y José de Faro, en 1629- sobre la nave de la Epístola. Sobre la cabecera, camarín cubierto con cúpula, datado en la primera mitad del siglo XVIII. Torre de dos cuerpos acabada a finales del XVI por Juan y Domingo de Aróstegui. Portada principal orientada al sur, en la parte baja de la torre, con tres arquivoltas molduradas. Otra portada en el último tramo, también al sur, de medio punto.
Iglesia de San Pedro
Iglesia de San Pedro Construcción en sillería, de finales del siglo XV y principios del XVI. La torre, de carácter defensivo, data del XII. Nave de tres tramos y cabecera cuadrangular. Múltiples capillas abiertas tanto en el lado de la Epístola como en el del Evangelio. Adosada al sur del primer tramo, ermita de los Santos Emeterio y Celedonio, de planta trapecial. Dos sacristías: la antigua, al sur de la cabecera; la nueva, marcando su contorno hacia el este. Torre orientada al norte, con dos cuerpos; en el superior, almenas que evidencian su antiguo uso. Portada orientada al sur, en la capilladel segundo tramo. Otra, secundaria, en el último tramo.
Ermita de la Virgen del Campo
A medio kilómetro en dirección a Garranzo. Edificio de sillería y sillarejo. Nave de tres tramos y cabecera rectangular. Cubre la cabecera una bóveda de cañón algo apuntado y la nave una de lunetos. Cabecera románica, del siglo XIII; el resto, del XVI. Tradicionalmente, se celebraba en esta ermita la misa en honor a San Isidro Labrador, tras traer la imagen en procesión desde la Iglesia de La Estrella
Ermita de la Concepción
Ermita de la ConcepciónA quinientos metros, en dirección a Arnedo. Construcción en manpostería y sillería de comienzos del siglo XVI. Nave de dos tramos y cabecera rectangular. La cubren terceletes sobre ménsulas. Adosado al este, Crucero de notable belleza formado por cuatro estribos que soportan arcos apuntados y crucería de terceletes; gradas redondas, fuste octogonal y, en el tercio superior, exagonal; figura mutilada del donante y escudo de armas.
Ermita de San Esteban
Ubicada junto a la carretera de Logroño, a tres kilómetros de la población. Construcción de manpostería y sillería, del siglo XVI. Actualmente se encuentra en ruinas y abandonada.
Nevero
Los neveros o pozos de almacenamiento de nieve son construcciones de arquitectura popular, que se sitúan en las cimas de los montes, dondes las precipitaciones en forma de nieve son frecuentes durante el invierno.
El pozo de nieve o nevero/a que tiene Enciso en el monte de la Nevera pertenece a los de tipología de abastecimiento, y consiste en una excavación cilíndrica revestida en su interior con mampostería y cubierta con una cúpula superpuesta, también de piedra.
Posee dos aberturas: un orificio de carga y otra de entrada para acceder al interior.